En Edesur tomamos todas las medidas de seguridad para protegerte durante las operaciones online. Por eso, queremos brindarte información y una serie de consejos que van a ayudarte a cuidar tu equipo y tu seguridad online.

Conectate con cuidado

• Enlaces sospechosos: los enlaces en los correos electrónicos, tuits, publicaciones y anuncios en línea son la forma que utilizan los atacantes cibernéticos para poner en riesgo tus dispositivos. Si recibes un correo no esperado o si es sospechoso, aún si conocés de donde proviene, es mejor eliminarlo o, si corresponde, marcarlo como correo electrónico no deseado.
• Conexiones Wi-Fi: limitá el tipo de transacciones que realizás y ajustá los parámetros de seguridad en tu dispositivo electrónico. No es recomendable conectarse a una red pública para realizar trámites, pagos o utilizar apps que requieran credenciales para su acceso.
• Protegé tus tarjetas de pago: si realizas una compra o hacés una transacción bancaria, comprobá que el sitio tenga activada la seguridad. El sitio es seguro si se indica como HttpS:// y si observas que el candado cerrado. «Http://» no es seguro.
• Comprá en tiendas de confianza: no te fíes de ofertas con los precios más bajos a los del mercado, ya que es una excusa para engañarte. Siempre es útil revisar que dicen otros usuarios acerca del vendedor. Realizá tus compras en tiendas oficiales.
• Controla tu presencia on line: configurá los parámetros de privacidad y seguridad en los sitios web al nivel de confianza deseado cuando compartas información. Limitá con quién comparte su información.

Usá contraseñas seguras

• Deben ser contraseñas difíciles de adivinar, pero fáciles de recordar. Usá letras mayúsculas (A, Z), minúsculas (e, g), números (0 al 9) y símbolos ($, #, &).
• Utilizá claves distintas para cada cuenta. Ayuda a frustrar ataques informáticos.
• Cambialas cada 30, 60 o 90 días.
• No las difundas ni las compartas con nadie.

Mantené limpio tu equipo informático (PC, Notebook, Smartphone, otros)

• Mantené actualizado el software de seguridad, el navegador web y el sistema operativo son las mejores defensas contra software malicioso y otras amenazas en línea.
• Automatizá las actualizaciones de software desde sitios oficiales. Muchos programas de juegos, editores de texto y otros se actualizan de forma automática para defenderse contra riesgos conocidos. Activá las actualizaciones automáticas de ser posible.
• Protegé los equipos informáticos que se conectan a internet. Además de las computadoras, smartphones, y otros dispositivos web también necesitan protección contra el software malicioso.
• Conectá y analizá. Los dispositivos USB y otros dispositivos externos se pueden infectar con software malicioso. Usá su software de seguridad para analizarlos previo a utilizarlos.

Mantenete informado y atento

• Permanecé actualizado: informarte sobre las formas nuevas de mantenerse protegido en línea, de nuevas amenazas y engaños. Visitá los sitios web confiables para obtener la información más reciente. Infórmese acerca de nuevas amenazas o engaños.
• Piensa antes de compartir información: desconfiá de las comunicaciones que te piden que actúes de inmediato o que apelen a tu emoción, que ofrecen algo demasiado bueno para ser verdad o que piden información personal. Evitá reenviar mensajes en cadena por mensajería instantánea o correo.
• No respondas apresuradamente: verificá las fuentes de información y remitentes de correos electrónicos, llamados telefónicos o mensajes de audio que recibas.
• Hacé copias de respaldo: protegé tu trabajo, música, fotos y demás información digital valiosa mediante una copia electrónica.

Mantené tu dispositivo móvil seguro.

• Protegé el acceso a tu dispositivo utilizando PINs, contraseñas u otras técnicas de control de acceso (lector de huellas dactilares, etc.)
• Mantené tu dispositivo móvil actualizado y las aplicaciones que usas frecuentemente también, ya que las actualizaciones te ayudan a protegerte de posibles ataques.
• En aplicaciones como las de tu banco, WhatsApp, billeteras electrónicas, utiliza doble factor de autenticación.
• Descargá siempre las apps de sitios oficiales.
• Solo activá la geolocalización, el WIFI y el Bluetooth en caso de ser necesario.

¿Qué es el Phishing?

Se trata de un tipo de fraude informático efectuado a través de una comunicación electrónica para adquirir información sensible, como nombres de usuarios, claves, números de tarjetas de pago (crédito/débito), entre otros.

Este tipo de engaño o fraude consiste en hacernos creer que estamos accediendo a un sitio oficial, cuando en realidad nos dirige a una página maliciosa que su finalidad es robar nuestro usuario y contraseña. El aspecto de estas páginas falsas es muy similar al de la página web original suplantada para que se crea que es la auténtica.

Los métodos usados para llevar a cabo este engaño son correos electrónicos principalmente, pero también mensajes de WhatsApp o cualquier red social. Todos ellos incluyen un enlace que, si seguimos, nos llevará a la página trampa.

¿Cómo protegerse del Phishing?

• Evitá el correo basura (SPAM), ya que es el principal medio de distribución de mensajes engañosos.
• No confíes en los remitentes sospechosos y siempre mira el dominio de correo electrónico del remitente.
• Evitá ingresar a enlaces y no descargues archivos adjuntos de correos o mensajes sospechosos.
• Recordá que ninguna entidad o institución responsable solicitará datos confidenciales o sensibles por email.
• Verificá siempre la fuente de información. Contactá personalmente o de manera telefónica a la entidad y de forma directa sin utilizar los contactos mencionados en el mail o mensaje recibido.
• Verificá que los sitios web a los que habitualmente se ingresas sean seguros, es decir que inicien con el nombre del protocolo de comunicación “HTTPS:\\”.
• Cambiá frecuentemente las contraseñas de sitios para transacciones bancarias, financieras o compras. Al cambiar las contraseñas utilice números, letras mayúsculas y minúsculas y caracteres especiales (&, %, $).

¿Cómo reconocer un mail falso?

• Transmite una falsa sensación de urgencia y afecta nuestra emoción.
• Los saludos inicial y final del mensaje recibido son genéricos.
• El texto presenta errores ortográficos y gramaticales.
• El texto contiene vínculos o enlaces falsos, y archivos adjuntos peligrosos.
• El remitente parece ser cierto, sin embargo, no lo es.