El aire acondicionado en modo calor es una de las opciones de calefacción eléctrica que más creció en los últimos años.  Resulta una alternativa conveniente  siempre y cuando el artefacto certifique un buen estándar de consumo por potencia. Eso podés chequearlo en la etiqueta de eficiencia energética que los artefactos tienen pegados con una escala de colores y letras. Grado A o superior y el color verde representan a los que menos gastan.

A modo de ejemplo, un aire split de 2200 calorías (clase A o superior) alcanza para calefaccionar un ambiente de entre 50 a 60 metros. Recordá siempre combatir las filtraciones de aire frío, más conocidas como «chifletes» que ingresan por puertas y ventanas para lograr una calefacción eficiente. Ayudate con masilla o burletes para minimizarlo.

La temperatura ideal para colocar el aire acondicionado en modo calor es 20º C durante el día, para asegurar un consumo promedio de de 1,01 kWh que equivalen a $7,91 estimados en promedio según el cuadro tarifario vigente para clientes residenciales.

Tené en cuenta que por cada grado que se subas el termostato, la demanda de energía puede incrementarse entre 7 y 9%.

Durante las horas de la noche, la temperatura ideal oscila entre 15º y 17º C si dormís abrigado. Es importante mantener una temperatura constante, elevarla de golpe sólo aumenta el gasto y no resulta eficiente.

La ‘temperatura ideal’ es un concepto subjetivo, pero atendiendo los parámetros regulares de confort y eficiencia, 20º C resulta una temperatura razonable para un ambiente aislado con ocupantes que visten un abrigo ligero.

Todos podemos apelar a trucos que no consumen energía para aumentar la sensación de calidez en el ambiente, como por ejemplo subir persianas o correr cortinas por donde ingresa luz natural permanente permitiendo la entrada de los rayos del sol para generar calor. En la mañana se pueden aprovechar todas las ventanas orientadas hacia el este.

En relación a otros artefactos eléctricos para calefacción, el aire acondicionado en modo calor reviste un nivel de consumo horario alto, pero bastante inferior respecto de otros. Este cuadro comparativo indica su posición relativa frente a los demás.

Si vas a comprar un aire acondicionado tené en cuenta a la hora de elegir la etiqueta de eficiencia y también la nueva tecnología inverter, ya que si bien es más caro que otras opciones, puede gastar hasta un 50% menos y el ahorro generará un fuerte impacto en el gasto de tu factura cada fin de mes.