Todo el resultado operativo positivo que obtiene Edesur a través de sus ingresos se destina a obras de infraestructura para mejorar la calidad del servicio.

Más inversiones

Las inversiones subieron 51% frente al año pasado y no se reparten dividendos a los accionistas, porque asumimos el compromiso prioritario de realizar todos los trabajos necesarios para mejorar nuestra red.

En 2019 destinamos unos 200 millones de dólares para realizar 621 obras de infraestructura en toda el área de concesión en baja, media y alta tensión para expandir y mejorar líneas (esto sin contar el gasto en mantenimiento).

Desde nuestro sitio web abrimos la información en cada partido para que los clientes conozcan cómo se invierten los fondos recaudados a través de la tarifa del servicio. De cada $100 que se cobran en la factura, Edesur percibe sólo $34 que destina a la gestión integral de la empresa.

Menos cortes

Los trabajos están dando resultados. En 2019, los cortes se redujeron un 40% en duración y frecuencia. En relación a los índices de calidad, Edesur cumplió las metas planteadas por el ENRE en el proceso de Revisión Tarifaria Integral.

No obstante, vamos a seguir trabajando para alcanzar en los próximos tres años alcanzar un nivel de calidad similar al del resto de los países de la región que han mantenido una política energética consistente a lo largo de los años.

Hurto de energía

El hurto de energía es un delito penal que pone en riesgo a la red y la vida de las personas. En 2018 calculamos que la pérdida fue de unos $2.000 millones. Las personas “enganchadas” no sólo afectan a la estabilidad de la red y perjudican a sus vecinos que tienen el servicio legalmente, sino que además son menos ingresos a obras.